jueves, 5 de junio de 2008

Birmania es denunciada por Amnistia Internacional (Terra)

AI denuncia que los damnificados son obligados a trabajar a cambio de comida.

Los supervivientes del ciclón que arrasó hace un mes el sur de Birmania (Myanmar) son obligados por las autoridades a participar en las labores de reconstrucción a cambio de comida, denunció hoy Amnistía Internacional (AI).La organización internacional comprometida con la defensa de los derechos humanos, también indicó en una rueda de prensa en Bangkok, que la Junta Militar birmana ha ordenado desalojar a los damnificados de los refugios temporales para que regresen a las aldeas que abandonaron tras la catástrofe.
Las acciones del gobierno ponen en peligro las vidas de decenas de miles de personas, que ya son vulnerables a la hambruna y las enfermedades', apuntó Amnistía Internacional.En un informe, la organización cita 40 casos en los que soldados o funcionarios han confiscado o desviado hacia otras áreas no afectadas por el ciclón, la ayuda humanitaria destinada a la población de la región arrasada, donde habitan 2,5 millones de personas.Según la Junta Militar, cerca de 78.000 personas murieron y otras 56.000 permanecen desaparecidas a causa del ciclón que atravesó el delta el 2 y 3 del pasado mayo.
La mayoría de las organizaciones internacionales humanitarias que trabajan en las zonas afectadas han bajado el tono de sus críticas a la Junta Militar para evitar que les prohíba desarrollar sus tareas.'Amnistía Internacional aprecia el delicado equilibrio entre mantener el acceso, aumentar el acceso al delta e incluir en su trabajo los principios de los derechos humanos', señaló en relación a las organizaciones humanitarias.El cómico más famoso de Birmania y destacado opositor a la Junta Militar fue arrestado esta semana por viajar a la zona afectada para distribuir ayuda entre los damnificados.
Maung Thura, más conocido por Zaganar, fue detenido el miércoles tras registrar la Policía su domicilio, al que acababa de regresar desde el delta.Zaganar, de 47 años, ha estado en prisión en varias ocasiones, la primera en 1988, cuando tomó parte en las marchas de Rangún que exigían reformas democráticas al régimen entonces liderado por el general Ne Win.Por otro lado, un equipo de 200 especialistas de la ONU, la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y de Birmania (Myanmar) entró el jueves en el delta para estudiar la situación y preparar un plan de acción.El secretario general de la ASEAN, el tailandés Surin Pitsuwan, manifestó a los periodistas en Yakarta que las próximas dos semanas de trabajos de este equipo serán 'cruciales para consolidar la confianza internacional en esta misión mixta'.
El resultado del trabajo se presentará a una reunión que la ONU, la ASEAN y el Gobierno de Birmania tienen previsto celebrar en Rangún el 24 de junio.Las autoridades birmanas, acusadas por Naciones Unidas y la comunidad internacional de ralentizar la distribución de ayuda a las víctimas con las trabas que impone a la libertad de movimiento de los cooperantes en el país, nombraron el mes pasado a la ASEAN coordinador oficial de las operaciones humanitarias.