Nuevas tropas birmanas se dirigen a Yangon desde el centro y sureste del país. Se desconoce la intención de estas nuevas tropas.- Han sido ya disueltos los cientos de manifestantes que han salido de nuevo hoy a las calles de Yangon.- Corte de la pricipal línea de Internet y cierre de los cibercafés Nuevas tropas del Ejército birmano se dirigen hacia Yangon (antigua capital de Myanmar, antes Birmania) desde el centro y sureste del país. Los destacamentos pertenecen a unidades del Comando Central, con cuartel general en Taun Oo, y al Comando Sureste. Se desconoce por el momento el motivo de este movimiento de tropas. Además, aviones militares han despegado de la base de Matehtilar.
Este nuevo despliegue coincide con la información de que el jefe de la Junta Militar de Myanmar, el general Than Shwe, se ha puesto al frente de las operaciones para sofocar las movilizaciones democráticas y que, en los últimos dos días, han causado quince muertos (diez según la Junta militar), entre ellos monjes budistas, por los disparos y golpes de los cuerpos de seguridad. El embajador australiano en el país, Bob Davis, ha asegurado, sin embargo, que el número de muertos es "significativamente mayor" debido a que los soldados lograron retirar muchos cadáveres tras los tiroteos.
La Junta Militar ha creado nuevos regimientos con la misión de someter a los manifestantes, cuyo número llegó a más de 300.000 personas en todo el país el lunes pasado y alrededor de 150.000 tan sólo en Yangon, la principal ciudad de la nación, el martes, antes de que el Gobierno impusiera el toque de queda y prohibiese las reuniones públicas de más de cinco personas.
Siguen las manifestaciones en la antigua capital
A pesar de las órdenes de las autoridades, cientos de manifestantes han vuelto a salir hoy a las calles de Yangon organizados por la Liga Nacional para la Democracia (LND), que lidera la Premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi. La protesta se ha concentrado frente al Hotel Trader y la pagoda de Sule, acordonada por un fuerte contingente de tropas con barricadas y alambres de espino. Los manifestantes, que no se enfrentaron a los soldados y antidisturbios, ya han sido disueltos.
El número de manifestantes, no obstante, ha descendido debido a que las tropas han ocupado los principales monasterios budistas del país para confinar a los monjes. Además, los soldados han aislado un barrio de la antigua Yangon. Las puertas de los monasterios han sido cerradas y las principales intersecciones cerca de los templos en Yangon y Mandalay fueron cortadas con alambre. "Nos han dicho que las fuerzas de seguridad tienen a los monjes bajo control", ha explicado bajo anonimato un diplomático asiático.
Corte de Internet
Uno de los pilares de las manifestaciones de estos días está siendo la información que desde blogs y páginas webs está saliendo fuera del país ante el control de los medios de la dictadura militar. La Junta quiere frenar también la difusión por estos medios y esta mañana han sido cerrados los cybercafés después de que las autoridades militares ordenaran su clausura. Fuentes de la disidencia han indicado que los cierres comenzaron el jueves y han continuado hoy, después de que anoche el Gobierno cortara el servicio de los servidores de Internet del país.
Este cierre se une a la avería que, según defiende un responsable de telecomunicaciones birmano, ha provocado el no funcionamiento del principal cable de Internet de Myanmar. Según este responsable, "Internet no funciona debido a que un cable submarino ha sido dañado".
Este nuevo despliegue coincide con la información de que el jefe de la Junta Militar de Myanmar, el general Than Shwe, se ha puesto al frente de las operaciones para sofocar las movilizaciones democráticas y que, en los últimos dos días, han causado quince muertos (diez según la Junta militar), entre ellos monjes budistas, por los disparos y golpes de los cuerpos de seguridad. El embajador australiano en el país, Bob Davis, ha asegurado, sin embargo, que el número de muertos es "significativamente mayor" debido a que los soldados lograron retirar muchos cadáveres tras los tiroteos.
La Junta Militar ha creado nuevos regimientos con la misión de someter a los manifestantes, cuyo número llegó a más de 300.000 personas en todo el país el lunes pasado y alrededor de 150.000 tan sólo en Yangon, la principal ciudad de la nación, el martes, antes de que el Gobierno impusiera el toque de queda y prohibiese las reuniones públicas de más de cinco personas.
Siguen las manifestaciones en la antigua capital
A pesar de las órdenes de las autoridades, cientos de manifestantes han vuelto a salir hoy a las calles de Yangon organizados por la Liga Nacional para la Democracia (LND), que lidera la Premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi. La protesta se ha concentrado frente al Hotel Trader y la pagoda de Sule, acordonada por un fuerte contingente de tropas con barricadas y alambres de espino. Los manifestantes, que no se enfrentaron a los soldados y antidisturbios, ya han sido disueltos.
El número de manifestantes, no obstante, ha descendido debido a que las tropas han ocupado los principales monasterios budistas del país para confinar a los monjes. Además, los soldados han aislado un barrio de la antigua Yangon. Las puertas de los monasterios han sido cerradas y las principales intersecciones cerca de los templos en Yangon y Mandalay fueron cortadas con alambre. "Nos han dicho que las fuerzas de seguridad tienen a los monjes bajo control", ha explicado bajo anonimato un diplomático asiático.
Corte de Internet
Uno de los pilares de las manifestaciones de estos días está siendo la información que desde blogs y páginas webs está saliendo fuera del país ante el control de los medios de la dictadura militar. La Junta quiere frenar también la difusión por estos medios y esta mañana han sido cerrados los cybercafés después de que las autoridades militares ordenaran su clausura. Fuentes de la disidencia han indicado que los cierres comenzaron el jueves y han continuado hoy, después de que anoche el Gobierno cortara el servicio de los servidores de Internet del país.
Este cierre se une a la avería que, según defiende un responsable de telecomunicaciones birmano, ha provocado el no funcionamiento del principal cable de Internet de Myanmar. Según este responsable, "Internet no funciona debido a que un cable submarino ha sido dañado".