La intensificación de las protestas en las provincias de Sichuan, Gansú y Qinghai ha generado el aumentado de la fuerza por las autoridades, según lo informó el diario'South China Morning Post'. En la ciudad de Aba, en Sichuan, la Policía abrió fuego contra los manifestantes, lo que causó varios muertos, según denunció la ONG 'Centro Tibetano para los Derechos Humanos y la Democracia'.
En Qinghai, cien monjes desafiaron una orden de confinamiento en su monasterio y, tras escalar una colina, tiraron petardos y quemaron incienso.
En la provincia de Gansú, tibetanos a caballo atacaron un edificio gubernamental y fueron repelidos brutalmente por la Policía. Los manifestantes lograron arriar la bandera china y alzaron en su lugar el emblema de 'Tíbet libre'.
El Gobierno pos su parte, aseguró que está embarcado en una "batalla de vida o muerte" en el Tíbet, luego de que terminase el ultimátum dado a los manifestantes tibetanos para que se entregarse a las autoridades.
"Estamos actualmente en medio de una fiera lucha con sangre y fuego, una lucha a vida o muerte con el enemigo", afirmó el secretario del Partido Comunista en el Tíbet, Zhang Qingli, en un artículo de opinión en el diario oficial 'Tibet Daily'.
El Gobierno chino confirmó la entrega a la Policía en Lhasa de al menos 105 personas implicadas en los disturbios, después de que en la medianoche del lunes pasado terminara el ultimátum dado por el Gobierno a los manifestantes.
En Qinghai, cien monjes desafiaron una orden de confinamiento en su monasterio y, tras escalar una colina, tiraron petardos y quemaron incienso.
En la provincia de Gansú, tibetanos a caballo atacaron un edificio gubernamental y fueron repelidos brutalmente por la Policía. Los manifestantes lograron arriar la bandera china y alzaron en su lugar el emblema de 'Tíbet libre'.
El Gobierno pos su parte, aseguró que está embarcado en una "batalla de vida o muerte" en el Tíbet, luego de que terminase el ultimátum dado a los manifestantes tibetanos para que se entregarse a las autoridades.
"Estamos actualmente en medio de una fiera lucha con sangre y fuego, una lucha a vida o muerte con el enemigo", afirmó el secretario del Partido Comunista en el Tíbet, Zhang Qingli, en un artículo de opinión en el diario oficial 'Tibet Daily'.
El Gobierno chino confirmó la entrega a la Policía en Lhasa de al menos 105 personas implicadas en los disturbios, después de que en la medianoche del lunes pasado terminara el ultimátum dado por el Gobierno a los manifestantes.
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