Los monjes anuncian más protestas en Birmania
ADRIÁN FONCILLASMAE SOT / ENVIADO ESPECIAL
Los vencidos en la revuelta birmana siguen prometiendo más lucha. El mensaje de esperanza que airea la oposición en el exilio fue recogido ayer por los primeros monjes que logran huir a Tailandia. "Hemos tomado la resolución de quitar a este régimen y seguiremos luchando", prometió U Pyin Niar, flanqueado por dos compañeros. Los monjes llegaron a Mae Sot, en la frontera birmano-tailandesa, y regresarán a Birmania en breve para continuar las protestas contra la Junta militar, que aplastó las revueltas.Los monjes vaticinan que las protestas se retomarán en tres semanas, cuando las cosas vuelvan a su curso normal. Dicen estar convencidos de que los militares no dispararán otra vez, como ocurrió en 1988 y en las dos últimas semanas. "Se han dado cuenta de que han hecho mal", sostiene U Pyan Niar, y menciona a los oficiales que han desertado por no querer dispararles. En el caso de que lo hagan, los tres monjes revelan un sentimiento generalizado de no retroceder. "Si disparan, tendrán que acabar con todos los religiosos del país. Estamos deseando dar la vida para cambiar este Gobierno".SORPRESA Alos monjes les sorprendió la violencia que emplearon contra ellos los soldados, que hasta el inicio de las revueltas les habían respetado. "Nunca pensamos que nos dispararían", dice U Pyin Niar. Los monjes prometen que rechazarán en adelante las limosnas ofrecidas por los militares, y recuerdan que el budismo prevé el peor de los ocho infiernos a los que los maltratan.Mientras, en Rangún continuaron los arrestos de disidentes y civiles que participaron en las protestas. El jefe de la Junta, Than Shwe, aseguró que se reunirá con la líder demócrata, Aung Sang Suu Kyi, si esta abandona su postura de "confrontación".
